La irrupción del conjunto albaceteño, con una escena independiente aún en ciernes, lo cambió todo. Hay un antes y un después de los cuatro álbumes que publicaron entre 1989 y 1993. “Más Allá” marca el regreso de Surfin’ Bichos a la actividad discográfica, 30 años después como si nada hubiera pasado, con la naturalidad de un asesino. Su paleta de sonidos sigue siendo igual de relevante; su música, igual de afilada. Sus canciones dejan huella. Los Surfin’ suenan a lo que quieren sonar. Esto es: pop bastardo; o un rock raro, un poco torcido. Rock de genética punk o proto–punk, cuya suavidad o dureza viene modulada por la emoción, por la historia que te está contando, pero sin perder su carácter orgánico, su forma animal. Se trata de un disco cocinado en los altos hornos de la pandemia en la absoluta soledad de un pueblo fantasma. Se encuentran, por tanto, “imbuidas por ese espíritu como de final, de más allá, milenarista".un trabajo majestuoso y solemne.